• El tránsito hacia prácticas de ciencia abierta trae consigo nuevas formas de entender y validar el impacto del trabajo científico.

Con la reciente incorporación de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID, a la Coalition for Advancing Research Assessment, CoARA, es necesario conocer las diversas miradas en torno a la evaluación de la ciencia. Por este motivo, las subdirecciones de la ANID y el Equipo de Implementación de la Política de Acceso Abierto se reunieron con Ismael Rafols, investigador senior del Centre for Science and Technology Studies (CWTS) de Leiden University y UNESCO Chair de Diversidad e Inclusión en la Ciencia Global.

El encuentro se llevó a cabo en las dependencias de la ANID el pasado 27 de noviembre y se constituyó en un espacio de diálogo para ahondar en los nuevos criterios que se deberían impulsar al momento de valorizar la investigación en el marco de la ciencia abierta. En este sentido, Rafols señaló que la actividad científica no solo debe valorarse desde una perspectiva cuantitativa -de productos y resultados-, sino que es fundamental extender las métricas a esferas que tienen relación con los procesos, aprendizajes y contextos en los que se hace ciencia, entendiendo que la gran diversidad de actores sociales, actividades y disciplinas asociadas debe formar parte de esta evaluación para enriquecer los conceptos de impacto y excelencia.

La subdirectora de Redes, Estrategia y Conocimiento de la ANID, Patricia Muñoz, señaló que la Agencia está avanzando en ese sentido, puesto que se están desarrollando diversos mecanismos que propician nuevas formas de medir el aporte de la investigación en un determinado lugar, incorporando variables que contribuyan a la articulación del ecosistema y aumenten la visibilidad del trabajo científico en los territorios.

Por último, Ismael Rafols invitó a comprender y materializar los criterios comunes de CoARA; principios que están vinculados a reconocer la diversidad de contribuciones de acuerdo con las necesidades y naturaleza de la investigación, uso responsable de indicadores cuantitativos y revisión por pares que incluya aspectos cualitativos, dejar de lado el uso inapropiado de métricas basadas en publicaciones y revistas y entregar más autonomía a las organizaciones para evitar clasificaciones en los sistemas de evaluación.